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Apr 03, 2023

¿Qué son los ladrillos refractarios y para qué sirven?

Los ladrillos, que van del amarillo al gris, al tradicional rojo y naranja, son omnipresentes en muchas de nuestras ciudades y se usan ampliamente en la construcción. En resumen, el proceso de fabricación de los ladrillos tradicionales consiste en moldear la arcilla y cocerla en hornos, lo que facilita la creación de bloques macizos, bloques perforados, cobogós, tejas y otras formas. Los ladrillos cerámicos son económicos; fácil de encontrar; cuentan con una gran resistencia, inercia térmica y acabado; y no requieren tal mano de obra especializada para la construcción. Pero si la instalación se realiza cerca de fuentes de calor intenso, el ladrillo común acabará fisurándose y rompiéndose, haciendo más adecuados los ladrillos refractarios. Pero ¿qué significa eso?

Puede parecer contradictorio que un material que ha sido quemado en hornos a temperaturas superiores a los 1000°C no pueda soportar altas temperaturas. De hecho, el principal problema es el choque térmico. Cuando el ladrillo común entra en contacto con una fuente de calor, se expande rápidamente. Cuando la fuente cesa (el fuego se extingue, por ejemplo), el material se contrae. Estos cambios bruscos de temperatura afectan la estabilidad de la estructura y pueden formar grietas y otros problemas graves. Los materiales refractarios son aquellos que pueden soportar altas temperaturas sin que el calor dañe su estructura, resistencia o conductividad térmica. En el caso de los ladrillos, la composición química de los refractarios es diferente a la de los ladrillos comunes, lo que también influye en su color y conductividad térmica.

Para usos domésticos, como hornos, parrillas y chimeneas, los ladrillos refractarios utilizados suelen estar compuestos por arcillas que contienen principalmente alúmina y sílice, elementos capaces de soportar altas temperaturas. Mientras que la alúmina tiene cualidades reflectantes, la sílice es un excelente aislante. Cuanta más alúmina presente en la mezcla, mayor será la temperatura que soportará el ladrillo (una consideración esencial para los usos industriales) y más cara será la pieza. La sílice tiene un tinte más grisáceo, mientras que la alúmina tiene una apariencia más amarillenta.

Además de la función técnica, hay arquitectos que utilizan ladrillos refractarios vistos para construir y revestir superficies. En el proyecto Tropical House Urveel, desarrollado por Design Work Group, los ladrillos refractarios se utilizaron de varias maneras. A veces porosos como un "jalí indio", a veces opacos y texturizados, a veces formando un patio ya veces actuando como fondo, estos ladrillos se veían por toda la casa.

Además de los propios ladrillos, el mortero utilizado también debe soportar altas temperaturas. Así, suele estar compuesto por áridos especiales como vermiculita y arcilla refractaria. Al igual que los ladrillos, también puede contener alúmina (Al2O3), mullita-zirconia y otros materiales.

Siempre es importante enfatizar que, al diseñar o construir estructuras que estarán en contacto con el fuego, es fundamental prestar atención a los materiales utilizados de acuerdo con las normas locales. Esta cantidad de cuidado es un pequeño precio a pagar para evitar pérdidas materiales o accidentes más graves. Buscar el consejo de expertos y fabricantes siempre es esencial.

eduardo soza
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